Sin haber pruebas que aporten seguridad sobre la información recabada, esta construcción es considerada un gran templo construido por Adriano, en honor y dedicación al emperador Trajano; situado en la zona más alta de la nova urbs, y rodeado por una plaza porticada con exedras; ocupando una superficie de una hectárea. Contaba con infinidad de esculturas y estaba circundado por cien columnas de mármol de Eubea; pórticos con exedras que albergaban esculturas sobre pedestales; estatuas en la superficie de la explanada; fuentes; el enorme templo elevado sobre un podio de 29 por 47 metros y un altar para los sacrificios, inscrita en un edículo rectangular situado frente al templo.